Adolfo, genuino.
Adolfo, se encuentra con el vecino, cara a cara, sin intermediarios. Donde el diálogo y la palabra tienen más valor que cualquier papel.
No importa el frío, como sucedió en Villa Mercedes, porque cuando el cariño es más grande, el calor lo genera el encuentro, la unión.
Adolfo camina hasta tu lugar, el lugar donde vivis, y no espera más que tu voz, porque esa voz es la que escucha.
Adolfo demuestra que es genuino, y que sabe hacer lo que siempre hizo por su San Luis…. ¡defenderlo!. Defenderlo del avasallamiento que quieren imponer. Defenderlo del ajuste, de la desocupación, de la inestabilidad, del desempleo.
Adolfo lucha por la promoción industrial, por las fábricas, por más viviendas, por la salud y la educación, por generar más puestos de trabajo, por los hombres y mujeres emprendedoras.
Adolfo estuvo en Villa Mercedes y seguirá recorriendo cada lugar al que lo inviten. Irá a cada lugar donde alguien necesite hablarle o pedirle algo.
Porque Adolfo siempre fue así, de eso se trata, de ser genuino. Sin capas, sin superficialidades, sin cascaras que demuestren otra cosa al descubrirlas.
Adolfo fue y será siempre el mismo, el que lucha por los intereses de San Luis. El que defiende su gente. El que recoge el guante y batalla cuantas veces sea necesario.
Adolfo es San Luis, y lo ha demostrado. Basta con ver sus proyectos en el Senado de la Nación. Sus luchas. Basta con ver la inmensidad de obras que marcaron un San Luis próspero y modelo de administración. ¿Acaso el candidato de Avanzar ha hecho huella en el Senado defendiendo la provincia?¿Acaso sus adversarios políticos muestran sus proyectos? ¿Se los cuentan a la gente durante la campaña?¿Los tienen?
Más allá de todo eso, Adolfo busca el reencuentro, y lo está logrando con cada palabra, con cada mirada, con cada estrechón de manos, con cada abrazo. Porque quien se le acerca, quien le habla y lo escucha, se da cuenta que es genuino, siempre lo fue, la historia de San Luis así lo muestra.
Se trata de ser genuino, y no, como sucede con otros candidatos, una mera sonrisa que oculta intereses tan lejanos del bienestar que merece seguir viviendo toda la gente de esta hermosa provincia.