Poggi convoca a un frente anti-Saá. Algo similar al fracaso que fue para la Argentina La Alianza ¿Lo recordás?
El Diputado Nacional convocó a todos los partidos que “piensan distinto al oficialismo” a unirse de cara a las elecciones.
No importa el proyecto, las ideas, ni el plan de gobierno. Hoy, la premisa para dicho candidato, pareciera ser socavar la estructura y poder de Alberto Rodríguez Saá, y si es factible la de su hermano también.
Es en esta postura tan viciada de ansias de poder, y sin reparar en el proyecto político, que lo que promueve el ex-gobernador CPN Claudio Poggi, es una alianza, una especie frente multi-partidario (con toda la complejidad que ello implica), sin importar a que partido corresponda, ni como dicho espacio ha de arreglarse para dejar contentos a cada uno de sus integrantes, y sus respectivas aspiraciones políticas.
Esto, a las claras, es algo muy similar a lo que sucedió en el año 1999 con La Alianza, un frente opositor conformado por diversos sectores como el Radicalismo, el Frente Renovador y otros espacios, que con el fin de ganarle la elección a Carlos Saúl Menem, se unieron en una especie de oposición que no tuvo buen desenlace, y que terminó siendo una de las etapas más complicadas para la Argentina en su retorno a la democracia.
Poggi en lo que propone, no dista para nada de lo que fue el fracaso de La Alianza, y en su ciega arremetida en defenestrar toda acción que lleve a cabo el Ejecutivo Provincial no mide las consecuencias de lo que él mismo impulsa. Sea candidato de Avanzar, o habiendo tejido vínculos con el Radicalismo, pasando por el pseudo partido Avanzar, y ahora en Cambiemos? Hay algo que en esa diversidad ausente de ideología partidaria, ni convicciones políticas, hace pensar que el único interés es el propio.
El fracaso de La Alianza
El acuerdo concretado entre la UCR y el Frepaso por necesidades mutuas, intentó consolidarse e institucionalizarse en el período delimitado por las elecciones legislativas de 1997 y las presidenciales de 1999. Se estableció un mecanismo para elegir la fórmula presidencial mediante internas abiertas en las que cada partido presentaría un solo candidato para determinar el orden del binomio que compartirían. Gracias a la estructura de la UCR y a que era visto como la contracara de Carlos Menem, Fernando De la Rúa .
La Alianza compró el diagnóstico de que el problema de la Argentina era político y no económico (algo muy parecido a lo que esgrime el sector del ex-gobernador). Esa lectura de la realidad, sobre la cual la Alianza basó toda su estrategia, demostró ser equivocada y pagaría las consecuencias. En casi todos los terrenos, la Alianza no logró definir los espacios que le corresponderían a cada partido, los mecanismos para la designación de funcionarios y la forma de reemplazarlos en caso de acceder al Gobierno como suele ocurrir en las coaliciones; además un peronismo discordante, y políticas que fueron desacertadas, confluyeron en un rotundo fracaso de dicho frente que quedó en la historia democrática de la Argentina.
quien puede confiar en este Sr que hasta hace poco fue gobernador de gracias a los RR, SAA. por favor no te cree nadie..!!!