
La campaña de desprestigio se largó
Contrario a lo que impulsa el gobernador Alberto Rodríguez Saá, quien remarcó que se «hará una campaña con enorme, enormísimo respeto» y que, «no se va a contestar ningún agravio»; desde otros sectores han comenzado con maniobras mediáticas, tal como sucediera en cada una de las ultimas elecciones, las cuales tratan de desprestigiar y desacreditar la gestión de Gobierno.
Esto resulta sencillo de poner a la luz ya que una de las metodologías empleadas es la instalación, de manera insistente y malintencionada, y a través de redes sociales y determinados portales digitales, cuestiones inherentes a salud y seguridad como ejes principales de problemática para intentar mellar la figura del gobernador, para sacar rédito político de ello de cara a las próximas elecciones.
Resulta curioso como mientras dichas elecciones se aproximan, en el mismo modo se acrecientan, como por arte de magia, y sobretodo en determinados medios de comunicación, los casos problemáticos de salud, o inseguridad.
Exsten portales digitales que no tienen otro objetivo que solo la publicación de aquello que podría perjudicar al gobierno o puntualmente a la figura del gobernador, se les hace cuesta arriba lograr dicho objetivo ante una imagen altamente positiva de Alberto Rodríguez Saá, que se mantiene sólida debido a varios factores, entre los cuales puede destacarse, su perfil respetuoso ante las agresiones que le propinan sus adversarios y la oposición, las gran cantidad de obras anunciadas y en plena ejecución en beneficio de la provincia, y la buena gestión de gobierno aceptada por gran parte de los puntanos.
Sin embargo las operetas mediáticas para socavar dicha imagen están a la orden del día. Una de las metodologías más usadas es el uso visceral y la exposición descuidada de personas con problemas de salud. Son casos aislados, puntuales, que debido a alguna situación burocrática o por desconocimiento sufren de alguna situación que podría perjudicarlos, pero que ante la acción de gobierno quedan solucionados. Estos casos, son expuestos, una y otra vez, a pesar de que se esté tramitando la solución o cumplimentando algún requisito que es necesario. Se los expone sin importar si son menores, sin importar cuan grado de vulnerabilidad. Todo ello en el afán de poder generar una sensación negativa en la sociedad.
Otra metodología es resaltar aquellos casos de inseguridad, aunque sean menores, como robos, hurtos, o de similares características, acusando ante la sociedad como una problemática o crisis de inseguridad.
Para lograr instalar estos temas, es válido el uso de trolls (perfiles en redes sociales con el fin de comentar y dar preponderancia de manera sistemática un tema determinado). También recurren a publicar los contenidos que arman en ese sentido, en los grupos de masivos de compra-venta aprovechando el gran caudal de usuarios que suelen tener. Otra de las formas es crear dichos grupos de compra-venta o con otra temática que interese a los posibles usuarios, invitándolos para que se sumen , pero finalmente utilizan los mismos para publicar noticias políticas con el objetivo que les atañe.
Generar charlas de whatsapp falsas mediante software para ello, utilizar audios guionados, generar fakenews con contenidos incomprobables, son parte de todo el vendaval de ardides mediáticos con los que habrá que saber lidiar durante estos últimos meses, o al menos mientras dure lo más intenso de las campañas.